El pasado viernes, la Ley de Bienestar Animal entró en vigor, y junto con ella, una serie de disposiciones que los dueños de mascotas deben tener en cuenta o enfrentar sanciones económicas. Una de las más sorprendentes es la posibilidad de recibir multas de hasta 10,000 euros por dejar a un perro atado a la puerta de un supermercado.
Aunque puede parecer un escenario poco común, la nueva ley otorga a la policía la autoridad para imponer fuertes sanciones a quienes dejen a sus perros en las afueras de un supermercado u otro establecimiento. Además, se aplicarán sanciones a quienes dejen a un animal dentro de un vehículo o en condiciones climáticas extremas que puedan poner en peligro su vida.
Según la ley, los perros no pueden pasar más de 24 horas solos en un domicilio, incluso si tienen suficiente comida y agua. En el caso de los gatos, este plazo puede extenderse hasta tres días.
Con la implementación de esta nueva legislación, se permite el acceso de animales de compañía a medios de transporte, establecimientos públicos y privados, alojamientos hoteleros, restaurantes y bares. Además, se garantiza el acceso a edificios públicos, refugios y centros de asistencia destinados a personas en situación de riesgo social, personas sin hogar o víctimas de violencia de género.»
En Vigo a las 24 horas de entrar en Vigor La Ley de Bienestar Animal se produce la «Primera multa de 500 euros por dejar al perro atado a la puerta de la farmacia»
La Ley de Bienestar Animal, que entró en vigor recientemente, ya ha generado su primera denuncia en menos de 24 horas de implementación. Esta primera infracción se relaciona con el artículo que prohíbe dejar a las mascotas atadas o deambulando por espacios públicos sin supervisión directa de la persona responsable de su cuidado y comportamiento.
La protagonista de esta historia es una joven residente de Vigo, quien el pasado sábado dejó a su dálmata atado afuera de una farmacia mientras entraba «por unos minutos para comprar unas plantillas». A su salida, se encontró con la Policía Local, que le impuso una sanción de 500 euros, con la posibilidad de reducción del 50% por pronto pago, según informa El Faro de Vigo.
La nueva ley prohíbe no solo dejar a los animales solos dentro de vehículos cerrados, exponiéndolos a condiciones peligrosas, sino también dejarlos atados o sueltos frente a un establecimiento sin la supervisión directa de la persona a cargo de su cuidado. En otras palabras, nadie más que el dueño puede cuidar al perro en estas circunstancias.»